El universo de los superyates que conquista los mares

El primer superyate propulsado por hidrógeno del mundo, el Feadship Breakthrough de 117 metros, ha levantado más que miradas entre los magnates tecnológicos; ha sido vendida incluso antes de ser entregada a su propietario, Bill Gates, desafiando las convenciones del lujo en el mar.

La historia de los superyates va más allá de su deslumbrante estética. Cada embarcación refleja la personalidad de su propietario y, a menudo, se convierte en un símbolo de estatus social. El Breakthrough, que ha estado en construcción durante cinco años, representa un avance audaz hacia la sostenibilidad en el mundo náutico. Bill Gates, conocido por su liderazgo en tecnología y su compromiso con la sostenibilidad, ha decidido poner su superyate a la venta en 2024, avivando especulaciones sobre sus motivos. Pero Gates no está solo en esta travesía de propiedad de yates. Figuras notables como Sergey Brin, cofundador de Google, y Jan Koum, fundador de WhatsApp, también han dejado su huella en los mares. El nuevo Dragonfly, de Brin, cuenta con una plataforma plegable que se transforma en un club de playa multidimensional, mientras que Koum se prepara para recibir un nuevo Abeking & Rasmussen de 80 metros, ampliando su impresionante flota.

La fascinación por los yates de celebridades

Desde el mundo del cine hasta el ámbito deportivo, la lista de celebridades que apuestan por la propiedad de yates es interminable. Actores como Nicole Kidman y diseñadores de moda como Tommy Hilfiger se destacan entre magnates como Lawrence Stroll, cuyo Feadship Faith, de 89 metros, llegó justo a tiempo para la temporada de Fórmula 1. La pasión por los yates también está presente en el corazón de España, donde el actor Antonio Banderas tiene un yate de crucero anclado en Málaga. Además, figuras del deporte como Tom Brady, Cristiano Ronaldo, David Beckham, Lionel Messi y Tiger Woods disfrutan de la vida en alta mar.

Los yates de celebridades cuentan historias fascinantes. Por ejemplo, J.K. Rowling ha transformado el superyate Samsara, anteriormente conocido como Infinity, en su refugio personal, acompañado por un yate de apoyo dotado de tecnología marina de última generación. David Geffen conquistó el océano con su Rising Sun, equipado con lo mejor en lujo y confort, mientras que el piloto de F1 Max Verstappen se dio un capricho por su yate Unleash the Lion para celebrar sus triunfos en la pista. Entre veleros y motores potentes, los buenos relatos abren las puertas a la creatividad e innovación en el diseño de embarcaciones.

La evolución del sector náutico, impulsada por personalidades influyentes, nos invita a cuestionar la noción tradicional de lujo. Estos superyates, que oscilan entre la innovación tecnológica y el diseño exquisito, destacan no solo por su apariencia, sino también por la experiencia única que ofrecen. En un mundo donde el compromiso con la sostenibilidad avanza, el hecho de que se construyan y vendan superyates como el Breakthrough sugiere que el futuro del lujo marino está destinado a seguir revolucionándose.