El estilo masculino de Hermès

En el mundo de la moda de lujo, pocos nombres resuenan con tanto prestigio como Hermès. Sin embargo, tras el inconfundible legado de esta Maison francesa, encontramos a una mujer cuya visión ha sido clave en la redefinición del guardarropa masculino: Véronique Nichanian. Desde su designación como directora artística de la línea masculina en 1988, su influencia ha sido inmensa, transitando un camino de innovación y elegancia que ha perdurado por casi cuatro décadas.
Aquí, el palacio de la moda se transforma en su lienzo personal. En su oficina, destacamos seis frascos de cristal repletos de coloridos trozos de tela; estas son sus “mood jars”, reflejos de su pasión por los textiles. “Quiero hacer ropa egoísta”, confiesa Nichanian, buscando siempre que cada prenda ofrezca una experiencia sensorial única.
La habilidad de Nichanian para fusionar el estilo parisino con un diseño cosmopolita ha elevado la oferta de menswear de Hermès a un nivel de sofisticación sin par. “Mi objetivo es expresar una forma contemporánea de vestirse”, explica, mientras enfatiza el uso de materiales de primera calidad para ofrecer una experiencia de lujo tangible.
Su mirada aguda hacia los detalles ha brindado a la marca un aire de modernidad, al tiempo que ha mantenido vivas las tradiciones de la casa. Cada colección no solo revela su destreza, sino también su amor por la simbología de la marca, donde los estampados se convierten en narrativas visuales personales.
Nichanian se mantiene firme en su compromiso con la excelencia. “No tengo un plan”, dice con determinación. “Si me aburro, simplemente buscaré algo nuevo”. Y así, el legado de Véronique Nichanian continúa, no solo como la mujer detrás del hombre Hermès, sino como una pionera en el vasto universo de la moda de lujo.